Pulso Autónomo Vascular de Nogier (N-VAS), diagnóstico auriculopuntural.
El reflejo cardíaco auricular fue descrito por primera vez por Paul Nogier (1972), y solo más tarde fue renombrado como señal autónoma vascular Nogier (N-VAS). El profesional toca ciertas partes del oído externo mientras monitorea el pulso radial en busca de una disminución o un aumento en la amplitud del pulso. El pulso puede parecer disminuir y colapsar, o puede parecer más agudo y más vibrante. La modificación del pulso puede ocurrir desde el segundo latido hasta el décimo latido después de la estimulación auricular. Este cambio en el N-VAS puede durar de 2 a 4 pulsaciones. El estímulo podría ser una presión táctil sobre la piel, pero también podría proporcionarse sosteniendo un imán sobre la superficie del oído, mediante estimulación láser pulsada, colocando un filtro de plástico de color sobre la aurícula o usando un portaobjetos que contiene un químico específico sustancia. El arte de esta técnica es aprender a sentir las sutilezas subjetivas del pulso radial. El diagnóstico clásico del pulso, tal como se practica en la medicina oriental, utiliza los tres dedos medios ligeramente colocados en la arteria radial en la muñeca. La técnica de pulso Nogier requiere la colocación de solo el pulgar sobre la arteria radial. En lugar de sentir las cualidades del pulso en estado estacionario, el N-VAS es un cambio en la amplitud del pulso y el volumen del pulso que ocurre en respuesta a la estimulación de la aurícula. El dominio de esta técnica requiere muchas sesiones de práctica con alguien que ya sea experto en el procedimiento. Ackcrman (1999) ha propuesto que el N-VAS existe como un sistema de respuesta biofísico autónomo específico que constituye uno de los principales sistemas de coordinación e integración del cuerpo. Al mismo tiempo, el N-VAS es una vía por la cual el sistema nervioso central recibe información y modula la salida simpática para una modulación precisa del sistema vascular sanguíneo. Se cree que el N-VAS ocurre en todas las arterias del cuerpo y se expresa a través de cambios en el tono muscular liso y la entrada de sangre. Este sistema vascular está controlado por factores derivados del endotelio, principalmente por el óxido nítrico vasodilatador (NO). NO actúa directamente sobre las células vasculares del músculo liso para regular el tono vascular. La liberación de NO está modulada por el esfuerzo cortante de la pared, la frecuencia del flujo pulsátil y la amplitud del flujo pulsátil. Desde el punto de vista de la teoría de la información, el suministro vascular sanguíneo controlado autónomo podría representarse como un sistema analógico, al contrario de las neuronas que operan como un sistema digital que consiste en impulsos neuronales de encendido o apagado. Como sistema analógico, el sistema vascular está regulado por la fuerza del flujo, las variaciones de longitud de onda en su fuerza y la dirección del flujo. La capacidad de adaptación del sistema vascular es el resultado de estímulos mecánicos, como el esfuerzo cortante de la pared y la presión transmural modulada por el tono muscular vascular.
Fuente: Manual de Auriculoterapia, Terry Oleson