Apoyo de las Tiroides, conversión T4 a T3, glutatatión

APOYO A LA TIROIDES
Hierba/

Suplemento

Usos y precauciones Dosis
Curcumina* Cuando los anticuerpos TPO son altos, siempre empiezo reduciendo la inflamación en el

sistema y eliminando los desencadenantes. El NAC y el picnogenol se pueden tomar junto

con la curcumina o como alternativa a esta

 

De 1.200 a 2.400 mg

diarios.

Guggul* El guggul es un remedio herbario que ha demostrado ser capaz de mejorar la función tiroidea al mejorar la conversión de la T4, la forma inactiva de la hormona tiroidea, a la T3, la forma activa. Esta hierba no debería tomarse durante el embarazo, pero se puede tomar cuando se da el pecho. Interrumpe la toma si el bebé tiene malestar estomacal cuando la consumes y deja de tomarla cuando los niveles de la tiroides se normalicen. 750 mg diarios.
Hierro El déficit de hierro le indica a tu tiroides que conserve la energía, lo cual se traduce en una

menor producción de la hormona tiroidea.

Entre las fuentes alimentarias de hierro, la carne roja y las aves de carne oscura tienen una forma muy absorbible, y si las comes varias veces a la semana pueden mejorar tus niveles de hierro rápidamente. Son también útiles las hortalizas de hoja, las alubias rojas, los albaricoques secos y las pasas (aunque estas últimas tienen mucho azúcar).

Si tu analítica muestra niveles bajos, también te puede ir bien tomar un suplemento de quelato de hierro -una modalidad de hierro que no causa estreñimiento- junto con 500 mg de vitamina C para mejorar la absorción. Con el hierro no habría que tomar los PPI, porque bloquean la absorción, y el hierro no debería tomarse junto con la medicación de la tiroides porque la bloquea. Deja pasar cuatro horas entre la toma del hierro y la de la medicación de la tiroides.

De 30 a 60 mg de hierro

Aminoquelado al día.

Selenio El cuerpo transforma el selenio en el potente antioxidante glutatión. El selenio protege la tiroides de la inflamación y del estrés oxidativo que daña el tejido de la tiroides e inhibe su función, y varios estudios han demostrado que puede reducir los anticuerpos TPO. Es también determinante en la conversión de la T4 a la T3.

Disminuye el riesgo de desarrollar tiroiditis después del parto en las mujeres que dan positivo en los anticuerpos TPO, y se puede empezar a tomar durante el embarazo y continuar en el periodo de posparto para reducir el riesgo.

Algunos profesionales sugieren que se puede conseguir suficiente selenio comiendo una o dos nueces de Brasil al día, pero yo recomiendo otros alimentos ricos en este mineral, como las setas, el cordero, el pavo, el pollo, los huevos, el bacalao y el halibut; añade las nueces de Brasil si te gustan, pero no en sustitución de un suplemento.

Hasta 200 mg

diarios (no excederse).

Vitamina D Se ha encontrado que los niveles de vitamina D3 en sangre son bajos en las personas que

tienen la enfermedad de Hashimoto y otras afecciones autoinmunes. Tomar suplementos de D3 a razón de 4.000 UI al día (2.000 durante el embarazo) puede ayudar o revertir la enfermedad tiroidea autoinmune. Los niveles se pueden comprobar cada seis semanas para ver si se ha de mantener la dosis o se ha de reducir (no recomiendo superar los niveles séricos de 70 nM).

De 2.000 a

4.000 UI diarias (2.000 UI diarias en el embarazo).

Cinc Implicado en la conversión de la T4 a la T3, es importante si tienes problemas con la conversión de la hormona tiroidea. 30 mg diarios. Tomar

con las comidas para

evitar las náuseas.

* No se aconseja durante el embarazo.

Romm, Dra. Viva, La Revolución de las Tiroides  y las glándulas suprarrenales, Editorial Siro